Por ZARAKIEL
Luces negras se aparcan en mi mente, ideas negativas que pronto; eso espero, se disipen y no dejen huella en mi psiquis, mucho menos en mi comportamiento; difícil es aquietar la mente cuando las olas del lago parecieran tener oleaje eterno, como cuando el vaso al parecer se encuentra lleno y desbordante, pareciera que no hay mas espacio para mas ideas, fantasías y preconceptos que atosigan y agreden con ahincó constante mi buena voluntad en el correcto pensar y accionar de la existencia, como sí la mente, mejor dijéramos como si el demonio de la mente sufriera de algún tipo de desorden alimenticio; es decir como si ese demonio padeciera de gula, porque siempre esta predispuesto a alimentarse de pensamientos fantasiosos y ociosos a cada momento, sin importarle que con estos pensamientos negativos acortan la existencia de la materia que desafortunadamente los contiene.